El término albañil o mazón significa maestro u oficial de albañilería, y designa a la persona con conocimientos profesionales y experiencia que se dedica al oficio de la construcción, reformas, renovación y reparación de edificaciones en general.
Tiene a su cargo a los peones y aprendices, y sigue las indicaciones del maestro de obras o de un aparejador.
Es una persona que realiza todo tipo de trabajos básicos de construcción: alzado de muros, paredes y tapias, colocación de cubiertas y canalizaciones de fluidos sin presión, apertura de zanjas, llenado y nivelado de encofrados con hormigón, preparación de cemento y otras tareas de obra no especializadas.
Un buen albañil está preparado tanto para construir una casa desde cero, como para hacer esas pequeñas reparaciones y reformas de interior o exterior de tu vivienda. Es uno de los gremios más polivalentes en el sentido de que están preparados para acometer una amplia variedad de tareas relacionadas con la construcción.
El trabajo del albañil es necesario para preparar y para finalizar el trabajo que llevan a cabo otros gremios. Por ejemplo, el albañil preparará las paredes para que el fontanero pueda instalar las nuevas conducciones de la calefacción y después se encargará de dejar las paredes listas para la pintura.
Aunque es difícil resumir todos los trabajos que llevan a cabo los trabajadores de albañilería, hemos intentado hacer una lista con las reparaciones del hogar más comunes que requerirán a estos profesionales:
Se suele decir que lo barato, al final, sale caro. Teniendo en cuenta que el trabajo de un albañil va a consistir, en muchas ocasiones, en realizar una reforma o reparación bastante aparatosa, acudir a una persona sin experiencia o con materiales poco fiables puede hacer que el desembolso final se duplique o incluso triplique. Vamos a ver como arreglar una “chapuza” de alguien sin experiencia, resultará más caro que haber acudido directamente a un albañil profesional.
Por pequeña que sea la obra para mejorar nuestro hogar, es importante recordar que va a durar por mucho tiempo, o al menos esa es la intención. Por ello, debemos poner en la balanza el tiempo que queremos que resista y en el otro la profesionalidad del albañil que va a realizar el trabajo. Más dinero no siempre significa más profesionalidad, pero es probable que un presupuesto extremadamente barato, dependiendo de la obra, no tenga la calidad deseada.
Además, debemos pensar que no solo el dinero cuenta en este tipo de trabajos. Solucionar ciertos trabajos de albañilería por personas no profesionales puede suponer graves peligros para ti y tu familia. Los trabajos de una persona no experimentada o con materiales de segunda, pueden ocasionarnos desde un resbaló por una baldosa mal colocada, hasta un susto mayor al caerse un tabique mal construido.
Los profesionales del gremio de albañilería nos proporcionarán dos clases de beneficios:
Encontrar un albañil ahora puede parecer una tarea fácil gracias a Internet. Sin embargo, la cantidad de información es tan elevada que puede resultar abrumadora y hasta confusa. De hecho, el problema a la hora de buscar un profesional del gremio de albañilería es saber si puedes confiar en esa persona o no; saber si la experiencia o la calidad de sus materiales es la que te está indicando y saber si quedarás completamente satisfecho con su trabajo.
Por suerte, hay gente que piensa en todo. Para ayudar a todas las personas que no saben a quién acudir para realizar un trabajo de albañilería, existen plataformas webs en las que podemos ponernos en contacto fácilmente con estos profesionales, como es el caso de Manitas en León.
Encontrar a un albañil profesional cerca y de confianza en Manitas en León es muy sencillo. Simplemente rellena el formulario, detallando los servicios que necesitas. Deberás describir detalladamente la tarea o trabajo de albañilería que deseas que se resuelva para asegurarte que el trabajo de albañilería se realice de una forma óptima y eficaz.
En algunas tareas como tapar un agujero con masilla o reparar un azulejo del baño, donde el trabajo de albañilería no es muy complicada, no es estrictamente necesario contar con la ayuda de un albañil profesional. En estos casos, lo recomendable sería contar con la ayuda de un manitas
Denominamos como "manitas" a aquellas personas habilidosas, capacitadas para realizar pequeñas reparaciones del hogar que no entrañan excesiva complejidad. Podemos exponer varios ejemplos de trabajos relacionados con gremios concretos, que el manitas, como desatascar el desagüe del lavabo; o de albañilería como tapar unos agujeros en la pared con masilla o yeso.
Pero... ¿qué ventajas tiene para ti contratar un manitas El motivo principal es el ahorro de dinero, del que hablaremos más adelante. Otra ventaja es que puede ser una persona cercana como un vecino o un conocido que te ofrecen confianza, además de darles unos ingresos extra y lograr que la avería se repare relativamente más rápido o en un horario más flexible para ti.
Para el resto de casos en los que la avería sea más grave o de mayor envergadura, sigue siendo recomendable acudir a un albañil.
El coste de los materiales como azulejos, lavabos, grifos… siempre correrá de tu cuenta. Sin embargo, tendrás que acordar con el albañil si eres tú o es él quien se encarga de trasladarlos hasta el domicilio. Esto también dependerá del lugar en que compres los materiales. Veamos varios ejemplos.
En caso de que hayas acudido a una tienda especializada en materiales y hayas visto las referencias de las piezas que quieres (marca, material, tamaño…) es posible que los mismos dependientes te ofrezcan un albañil de la casa para realizar la reforma. De esta manera, no tendrías que preocuparte de nada, ya que el albañil o la tienda se encargará de entregarte el material en tu domicilio. Lo más probable es que te ofrezcan un presupuesto cerrado en el que se incluirá el material y la mano de obra o servicios del albañil.
Otro caso sería que el albañil y la tienda de materiales no tuviesen ninguna vinculación. De esta manera, serías tú el encargado de contactar con un albañil independiente y de reservar los materiales.
Existen muchas opciones en el mercado para comprar los materiales. Puedes encargarlo por Internet o puedes pedirle consejo al propio albañil, aunque no esté asociado a ninguna tienda. El albañil sabrá recomendarte sobre el azulejo y los materiales más recomendables para el tipo de reforma que va a realizar. Por ejemplo, si quieres reformar un baño pequeño, es probable que no te recomiende unos azulejos muy grandes, ya que sería necesario hacer cortes en los azulejos y el resultado final no sería muy estético.
Depende de la disposición a aconsejarte que tenga el albañil, incluso podría acompañarte el mismo a seleccionar los materiales, y encargarse del traslado de los mismos hasta tu domicilio. Todo será cuestión de hablarlo.
Si quieres hacer una reforma, reparacion o modificacion del revestimiento de alguno de los habitáculos de tu casa, necesitas una licencia de obra. La licencia de obra es necesaria para cambiar cualquier elemento que afecte a la estructura del interior de tu casa. Incluso para cambiar o sustituir algún aparato sanitario, necesitas una licencia de obras.
La licencia de obras menores es un documento que te acredita como responsable de la reforma u obra dentro de tu vivienda. La documentación y requerimientos para obtener una licencia de obras están especificadas por cada ayuntamiento de cada localidad. Por ello, te aconsejamos que si estás pensando en realizar una reforma o reparación, acudas a tu ayuntamiento a informarte de los requisitos y documentos para obtener una licencia de obras.